La evidencia más utilizada en el estudio de color de los seres vivos es actualmente son los archivos de fotografía y los video, en la antigüedad lo fueron las hermosas láminas realizadas por los dibujantes y naturalistas de las expediciones y las colecciones de historia natural contenidas en los museos, colecciones, gabinetes y herbarios, por mencionar lo más comunes. Estos dibujos formaban parte de libros, folletos y enciclopedias.